Viena: palacios, Sisi Emperatriz, cafés, valses y el Danubio

Máxima representación de Austria, Viena (Wein en alemán) conjuga impresionantes palacios, historias de amor, música de ensueño, cafés de renombre, disputas en creación de tortas, caballos danzantes, represión y tolerancia, espías. Seguro dejo algo afuera.

Capital de este enclave de historia entre Este y Oeste en la Guerra Fría, reconstruida con gusto después de la Segunda Guerra, hay mucho más para hacer y disfrutar de lo que parece y seguro requiere planificación para hacer todo en un visita o dejar claro qué quedan cosas para las siguientes.

Como comentaba en este post https://wordpress.com/post/raspandoelmapa.com/1329 las lluvias hicieron que prácticamente le saque un día completo a Viena para poder recorrer algo Salzburgo, por lo que merecerá una visita adicional, más que tengo amigos locales ahora.

Lo principal a recorrer está cerca y a distancia de caminata dentro del RingStrasse, un boulevard que se ubica donde estaban las murallas hasta el siglo 16. Por eso para alojarse si se está fuera del mismo, que abarata costos, lo importante es estar cerca del metro o algún tranvía.DSC07736

Uno de los puntos más queridos por los vieneses es su catedral San Esteban (Stephansdom). Mezcla de estilos como siempre que se hace en etapas, la dominante es el gótico. Una de las cosas me impactó fue el color dentro por el sol y los vitrales, en algunos casos reemplazados por líneas de color, pero que le dan un aspecto totalmente distinto a lo que uno encuentra en catedrales de este tamañoDSC07466DSC07480DSC07472DSC07479DSC07420DSC07411DSC07427DSC07445DSC07400

Otro punto importante es la cantidad de reliquias de santos, que siempre fueron un trofeo, pero no me hubiera imaginado tal concentración en Austria.

Otra iglesia cercana es St Michael, más clásica y pequeña y de camino a los Departamentos ImperialesDSC07488DSC07492DSC07498

El Palacio Imperial de Viena (Hofburg) es donde efectivamente vivían los Habsburgo, Emperadores hasta 1918, la crisis de la Primera Guerra los llevó a disolver el Imperio y Austria se convirtió en República. El impacto económico fue tan grande, que aun hoy, Viena tiene menos población que en 1918. Pero estas edificaciones y su contenido dan cuenta de la potencia que tenían en dicho momento.DSC07504DSC07505DSC07537

La costumbre es que cada regencia agregaba algo al conjunto y da como resultado una mezcla de estilos y tamaños.

Uno de los museos que alberga son los Departamentos Imperiales (Kaiserappartements), donde vivieron Francisco José y Elisabeth (conocida como Sisi).

En la parte de Sisi no se pueden sacar fotos, pero está toda su historia y muchos elementos que le pertenecieron, como su vestido de novia. Como historia real, no deja de ser triste y aun no habiendo visto la película, conmueve todo lo que le fue pasando.

Otra sección increíble es la dedicada a las porcelanas y platerías de los distintos emperadores, detallando los distintos estilos de cada época, costumbres de cómo doblar servilletas y mesas preparadas como eran usadas. Centros de mesas espectaculares muestran el lujo con el que vivían.DSC07508DSC07516DSC07521DSC07531DSC07525

Otra sección es la del Tesoro (Schatzkammer) donde capas de cuento, piedras preciosas de tamaño inimaginable, anillos con la imagen de Sisi y coronas imperiales se mezclan con reliquias religiosas, de las que se destaca una que contiene un clavo de la Cruz de Jesús y una espina de la Corona.

También en ese conjunto esta la Escuela Española de Equitación, que no pude visitar por falta de tiempo.

Muy cerca, está Museo de Bellas Artes (Kunsthistoriches Museum) que comprende pintura, esculturas, antigüedades romanas y griegas, y una colección egipcia en un hermoso edificio en la Maria Theresien Platz (Plaza Maria Teresa). Es el mayor exponente de las colecciones de los Habsburgo y está considerado uno de los museos más importantes de Europa. No es abrumador como otros grandes museos, ya que su tamaño es más acotado y la colección variada.

Dentro de la zona hay otros museos de arte, tanto moderno como antiguo. Viena como capital imperial tuvo épocas de auge en el desarrollo de escuelas, algunas de avanzada en el siglo 20.

También se pueden visitar las casas de Mozart (donde escribió las Bodas de Fígaro) y Beethoven (este residió en 35 distintas, por lo que es una de ellas)

Esto nos lleva a otro lugar representativa de Viena que es la Opera. No había previsto ir a ninguna función, por lo que no la conocí por dentro. El exterior es muy bello igualmente y si pude ver por pantallas en el exterior parte de una función.DSC07393DSC07395DSC07780DSC07782

En los alrededores siempre hay cazaturistas con vestimentas de época.DSC07784

Hay más museos aun como el Leopold, el edificio Secesión (donde comenzó el movimiento contra el arte conservador, entre los que estaba Gustav Klimt), el Mumok (arte moderno) y Kunsthalle (arte contemporáneo)

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Edificio Secession
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HofsBurg Theater

En las afueras del centro histórico esta el palacio de Schönbrunn. El acceso es fácil ya que se llega por metro.DSC07629

Este palacio de recreo tuvo su apogeo en el siglo 18, durante el reinado de María Teresa. A pesar de ser palacio de verano, estaba bastante cerca de la ciudad en esa época y con acuerdo previo, se podía visitar las salas ceremoniales, aun cuando la Corte lo usaba.

Hoy se puede visitar completo y como respeté el hecho de no sacar fotografías dentro, si pueden apreciar el tamaño de los jardines y la glorieta, donde hay un café para sentirse parte de la misma durante un rato.DSC07631DSC07633DSC07639DSC07641DSC07645DSC07656DSC07659DSC07661DSC07663DSC07664DSC07670DSC07672DSC07673

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vista de la ciudad desde Schönbrunn

Otro punto principal de la ciudad son sus cafés. Compiten en desarrollar las mejores tortas, algunas objeto de disputa como la Sacher torte, ya que cuando la desarrollo como receta, Franz Sacher trabajaba en Demel. La justicia dictaminó que el hotel puede usar el nombre original, mientras que Demel la presenta como una variedad. Solo probé la del Hotel.

Demel está ubicada muy cerca del Palacio Imperial, por lo que como todo en esa época, cuanto más cercano, más prestigioso.

Otro café que me encantó fue el Café Central, mucho más amplio que los anteriores, donde siempre hay un pianista para sentirse en otra época.

Los edificios asombran en su pulcritud y cuidado y la vista no para de recrearse.DSC07741Ayuntamiento – Rathaus

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Parlamento
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Hofburg Theater desde VolksGarten
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Volksgarten – Plaza del Pueblo

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Kunthistorisches Museum
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Museo de ciencias naturales
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Museo Albertina

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Restaurant PalmenHaus
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Pestsäule – Columna de la Peste

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También del otro lado del Danubio, está el Riesenrad, una rueda de 1897, símbolo del modernismo de la época, con cabinas muy lindas, pero algo alejada del centro histórico y no tan alto como para apreciarlo a tanta distancia (supongo porque tiene solo 65m contra los más de 100 de la torre de la Catedral).

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El Danubio, por las lluvias que me venían acompañando en los días previos, estaba muy crecido y más allá que todos saben que no es azul, las zonas costeras estaban poco transitables.

También hay un mercado, Naschmarkt, el más grande de la ciudad, que abarca una plazoleta de 4 cuadras, donde se pueden probar muchas especialidades locales como la wiener schnitzel (milanesa de cerdo) a comidas internacionales. Viena es un ciudad bastante abierta a otras culturas y costumbres, dada la gran presencia de organismos internacionales y empresas que la usan de base para atender la región.DSC07687

Me quedó tanto fuera de mis recorridos que seguramente volveré con tiempo. Fueron finalmente dos días completos, absolutamente escasos para abarcar tantas propuestas. Y repasarlos para escribir esto, me dieron ganas inmediatas de volver.DSC07626

Stephan y Christine, preparen el cuarto y la parrilla en Gurtis!!!

2 comentarios

  1. Que linda que es Viena!! Me hiciste acordar de todos los lugares alucinantes que recorrí en el 2015 cuando la conocí (flasheé con el Kaiserappartements porque además, había leído varios libros de Sisí) y las cosas ricas que comí, como la Sacher torta (que también probé la del Hotel y me gustó mucho). A diferencia tuya, tuve la suerte que me tocaran muy lindos días (fui en septiembre) y de estar mas tiempo, por eso, si tenes la posibilidad de volver, te aconsejaría que lo hagas y la sigas recorriendo porque tiene muchos mas lugares increíbles. Y si podes después, seguí para Praga, que es otra ciudad que a mí me encantó! (aunque no tiene tanta «majestuosidad» como Viena, pero sí una cerveza mas rica, jajaja)
    Gracias por hacerme viajar nuevamente!!

    1. Gracias , siempre presente. La verdad que escribiendo el post revivi mucho y me di cuenta que iria de nuevo sin dudarlo y con más tiempo. Hay muchas ofertas de museos que en ese momento no me sentí atraído y fui descubriendo por casualidad con el pasar del tiempo. Praga lo hice en un viaje previo aun (2011 vs 2013 este) y me encantó. Es hermosa, pero me parece que Viena es mas variada. Pero si tengo que volver a ambas, vuelvo, no tengo problema. En Austria tengo la ventaja de tener amigos

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