En el año 2006, en mi primera visita a la zona de Nueva Inglaterra, visité Cape Cod, que es la zona de veraneo cercana de la gente de Boston. Es como los Hamptons para los neoyorquinos. La diferencia está que en Boston se consideran más aristocráticos y el poder y el dinero de Nueva York es contraatacado con clase e historia (se jactan de ser los reales descendientes de los primeros colonizadores). De hecho, cerca del puerto que lleva a la isla está la casa de los Kennedy.

Más allá de estas tertulias, esta isla rivaliza también con Martha´s Vineyard y entre ambas atraen cantidades de gente por el día, por pequeñas temporadas y principalmente, fines de semana, donde se va a descansar o de invitado a una de las numerosas bodas que se realizan allí. Por ello, primer consejo, para bajar el costo, eviten los fines de semana.

El lugar también es nombrado en la novela Moby Dick, ya que además fue un puerto ballenero en otras épocas. De la misma queda un Museo Ballenero en el puerto.

Esa primera visita fue tan espectacular, que a pesar de ser en invierno y limitarla al pueblo de Nantucket (donde llegan los ferries), me propuse quedarme al menos un par de noches para disfrutar de los rincones más alejados. Las fotos son de la última visita, ya que la primera fue en era no digital y esta fue más amplia.

La oportunidad se dio en 2017 cuando recorrí algunos rincones de Nueva Inglaterra luego de estar unos días en Nueva York.

Para llegar hay tres alternativas. Avión, ferry lento para llevar auto o catamarán. Opté por la tercera, ya que alquilaría una bicicleta una vez en la isla.

El puerto es en Hyannis, en Cape Cod. Tienen muchos horarios, se usan para trasladar turistas y trabajadores, ya que la isla es cara para vivir y muchos van y vuelven diariamente (es un trayecto corto). El auto se puede estacionar en un parking de la compañía (tiene costo) e incluso lo deje con una valija (ya había comprado bastante en los días de NY).

Es muy normal que haya bruma, pero eso no hace que el viaje sea placentero y para sacar fotos de la costa.

La llegada a la isla coincidió con el atardecer, que tuvo unos colores increíbles, que hacían lucir el faro y el puerto.20170913_183955

De ahí al hotel, ya que los alojamientos en la zona del puerto aun en días de semana, por ser verano aun, eran algo elevados. Opté por el Nantucket Inn en general no pongo los hoteles, pero este tenía algunas características muy buenas: pileta cubierta, desayuno incluido, frente al aeropuerto (se veía la plataforma comercial desde la terraza), excelente atención, muy tranquilo y transporte gratuito desde y hasta el puerto cada media hora prácticamente todo el día.

Si bien hay algunos lugares en las afueras, para cenar lo mejor es ir al puerto y aprovechar. No hay muchas opciones pero hay algunos pubs con ambiente y muy buena comida sin morir en el intento. Hay lugares muy buenos pero más del estilo romántico caro (como es el target de la isla en general). Opte por el Back Yard BBQ. Otra opción, muy valida para el día, es aprovisionarse en el Stop ana Shop, un supermercado muy preparado para armar picnics en la playa. También en los rincones más lejanos se encuentran barcitos para tomar café, comer algo al paso o reforzar el picnic.

A la mañana siguiente me trajeron la bicicleta al hotel, me cobraron con tarjeta y me indicaron donde dejarla atada al final (dentro del hotel, en un estacionamiento) y que ellos pasarían a buscarla al final del lapso. Impecable servicio así como la bici.

La isla tiene 20km de largo y en ambas puntas hay lugares lindos para hacer. Para recorrer todo hice 60km en el día. Fui a ambas puntas y al día siguiente hice bien el puerto y las playas más céntricas. También hay algún transporte público y taxis. O se pueden alquilar algún auto, moto o buggy. Es un lugar para pasarla bien y recorrer. Si les gusta ver casas y playas, es ideal.

Las casas son mayoritariamente de madera, de tonos grises por el paso del tiempo o pintadas mayormente de blanco. Tambien hay de ladrillos rojos. Todo depende de la epoca a la que pertenecen. Son espectaculares. Los jardines son mantenidos a nivel de competencia para que luzcan. Hay muchos detalles. Piensen que una casa termino medio bien ubicada está arriba de 10 millones de dólares.

La primera parada fue Siasconset, que es un lugar histórico, de hermosas casas, una linda playa. Tiene la particularidad de ser el lugar más cercano a España y Portugal de EEUU.

Un detalle es que mucha gente deja el calzado al entrar en la playa. Impensado en otros lugares.20170914_110128

La isla está llena de bicisendas. Es bastante plana pero tiene algunos lugares con ondulaciones, que al final del día se sienten.

Hacia el oeste se llega a Madaket. El paisaje es algo distinto. Las casas son algo menos pintorescas pero más abiertas a la vista. Hay más calles de arena (lo aclaro por la bici, tiene que ser mountain bike) y vale la pena la visita también. Conviene ir a la tarde dado que está hacia el oeste. Si la bruma lo permite, tendrás atardecer sobre el Atlántico.

El centro es otra joya, la concentración más memorable de historia de la isla. Las calles aun son de adoquines (y muy desparejo). Una característica muy particular son las terrazas sobre los techos a dos aguas.

En la playa que se ve al entrar al puerto, hay un parador donde almorzar. Son un poco más sucias por haber más algas, pero es muy linda para caminar, ya que hay unos pequeños acantilados que dan otro paisaje.

Los comercios son mayormente de indumentaria (los dos extremos, cara o barata), joyería, arte, decoración y recuerdos.

No me canso de recomendar una visita a la isla, de la forma que puedas. Como siempre digo en estos lugares pequeños, si se pueden dar el lujo de una noche al menos, la experiencia es totalmente distinta. Si no, concentrarse en la zona de puerto y cercana, es una experiencia totalmente válida.

por raspandoelmapa

Mis experiencias de viaje. 25 años de aprendizaje con los que espero seguir

3 comentario en “Nantucket”

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