Europa es la imagen de nuestras vidas pasadas. El High Line Park de Nueva York es una demostración de lo que puede significar el reciclado y transformación de las ciudades más modernas, que no siempre necesitan arrasar con todo para transformarse y respetar el pasado, aunque sea reciente, al mismo tiempo.
De donde surge? Hasta comienzos del siglo 20, la zona oeste de Manhattan era fabril, con muchos depósitos y fábricas al sur de la calle Houston (origen del SOHO). El tren era una forma fundamental de transporte en EEUU, con grandes fortunas relacionadas, como la que relaté en https://wordpress.com/post/raspandoelmapa.com/1170
Pero el crecimiento del tráfico por la llegada del auto y los camiones que hacían el reparto final desde esos depósitos, complicó de tal manera la convivencia que generó el sobrenombre de Avenida de la muerte a la 10th avenue.
Por eso se decidió construir en 1934 una línea de tren elevada que partía de los ramales de la Penn Station hacia el sur y permitiría entrar a los edificios contiguos desde un tercer piso, desalojando de trenes el nivel de la calle.
Para 1980 prácticamente no tenía uso, por la llegada del camión en forma definitiva y lo costoso de mantener operaciones logísticas dentro de la isla, por lo que la High Line quedó en desuso.
En 1999, cuando maduraba la idea de la demolición, los Sres Joshua David y Robert Hammond crearon la fundación Amigos de la High Line para conseguir su preservación a partir de su transformación en parque público.
Se inspiraron en la transformación que en los años previos había realizado París en su Viaduct des Arts, cercano a la Opera de la Bastilla (Distrito XII). Ese lo conocí en 2015 pero se había terminado en 1993.
En 2009 se inaugura su primer tramo. Progresivamente se iría completando de sur a norte, hasta llegar a la calle 34. Aun queda un pequeño tramo sobre la 30th que será inaugurado en 2019.
Justamente ese 2009 visité NY a finales de año, pero no sabía de su existencia.
La siguiente visita fue en 2012, cuando coincidí con un compañero de secundaria, facultad, compañero de depto de solteros en Buenos Aires, él por trabajo y yo visitando mi primer UsOpen (pagando entradas, como explico acá https://wordpress.com/post/raspandoelmapa.com/171)
Gustavo fue quien me contó que la había visto en un viaje anterior y me recomendó ir.
Fue amor a primera vista. Una idea distinta, muy abierta y por su uso anterior, muy pegada a las construcciones cercanas.
Como parte de la planificación urbana, se comenzó a transformar la zona adyacente. Se calculan USD 5500 millones que se han invertido a su alrededor. Tal como fue sucediendo con el Soho y el Meatpacking District antes.
Se notaban nuevas construcciones que comenzaban a surgir, edificios que transformaban sus espaldas para mostrar arte, y que dar al frente o detrás tenía el mismo valor.
Uno puede ver un poco dentro de esos departamentos (soy muy curioso) y siempre puede llevar a sorpresas.
Hoy en su extremo sur tiene un excelente museo como el Whitney, cuyo edificio fue inaugurado en 2015 y complementa la enorme cantidad de galerías de arte de la zona
A una cuadra de andar el Standard Hotel que la cruza como una torre, cual si fuera un puente fortificado.
El Chelsea Market es una parada obligatoria casi para aprovechar para comer algo, no importa la hora, y pasear por sus locales vintage o bazares.
Suceden cosas, como ver sesiones fotográficas de modelos, alguien preparando para pedir la mano de su prometida, quedarse en alguno de sus sillones (si se consigue lugar)
Las plantas evolucionan con las estaciones (estuve en invierno y verano y es bello en ambas épocas)
El mobiliario no desentona nunca.
Las vías aparecen aun en algunos tramos para recordarnos de donde vino esto.
Hay carteleras para ver la historia, si no la leíste antes en su página oficial www.thehighline.org. Aunque no sepas ingles, está bárbaras las fotos, para entender lo que contaba al inicio. También tiene todo el calendario de actividades mensuales.
Hay lugares donde ver el tránsito como desde un puente, como si fuera la primera vez que viéramos un auto
Se pueden ver algunas construcciones a lo lejos, que todos conocemos.
Mucho cambia de visita en visita.
En la parte sur tenés un bar para apuntar al norte equipado con un café en mano.
Cuando vas llegando al norte y gira para acercarse al río Hudson, está el desarrollo urbano más importante de la ciudad en este momento, al que comparan en disruptivo con el Rockefeller Center. Se llama Hudson Yards. Constará de edificios de oficinas, de departamentos, shopping y zonas públicas y apunta a estar terminado en su mayoría en 2019.
Tres cosas pude ver que se destacarán:
- un mirador a 300 metros, a cielo abierto, con un restaurant mirando al Hudson
- The Shed, un edificio para eventos artísticos, parcialmente retráctil (techos y paredes de 6 pisos se podrán expandir para ampliar el área cubierta)
- Vessel, una instalación de arte con forma de colmena, de 50 metros de altura, 154 escaleras y 80 descansos. Parece una locura, pero seguramente subiremos muchos.
Todo esto con un pequeño detalle. Está sobre 28 vías de ferrocarril que salen de Penn Station, la más transitada de la ciudad.
Disclaimer, no vendo los condominios ni alquilo oficinas, pero vean lo que será en www.hudsonyardsnewyork.com
Las vistas desde el HighLine son impresionantes ya.
Finalmente, volviendo al parque, “sólo” lo transitan 4 millones de turistas por año. Vayan mientras sea aun manejable, de día, al atardecer, con frío o con sol. No se van a equivocar. Aunque fueran solo unas vías abandonadas hasta hace poco.
Excelente post, gracias por compartir información!
un placer que lo disfrutes.
Muy buena info. Gracias
Gracias JuanMa. Un abrazo
[…] Pero la llegada del automóvil le quito protagonismo y factibilidad a esa idea y el proyecto cayo en desgracia. Incluso se comenzaron a rellenar los canales, lo que no se termino de hacer por la falta de presupuesto. Algo muy parecido a lo que contaba sobre la High Line aquí http://c1601337.ferozo.com/2018/05/06/highline-la-evolucion-con-nombre-propio/ […]